LAS MONEDAS COMPLEMENTARIAS
Las monedas complementarias han surgido como soporte para quienes no perciben ingresos monetarios o como creatividad aplicada a generar negocios sin dinero. El dinero se ha convertido en una traba y en un fin en sí mismo y la economía financiera hoy supera con creces la economía real.
¿Aceptaría un regalo un billón de billetes de un dólar con la condición que los cuente usted mismo?. La trampa es que tardaría más de 60 años. El pez es el último en darse cuenta que el agua existe, porque es su medio natural. Lo mismo nos ocurre con el dinero: nosotros lo creamos y luego el dinero nos crea. Un estudio reciente descubrió que el dinero impulsa a la independencia, pero no a dar ayuda o a donarlo para causas humanitarias. Warren Buffett, donó 30 mil millones a la Fundación de Bill y Melinda Gates. Los encuestados dijeron que harían lo mismo si tuviesen dinero, pero el experimento demostró lo contrario.
El rol del dinero. Su rol civilizador es saber que para defender intereses propios se depende de la gente y de tratarla de manera justa. Pero el estudio muestra que el dinero puede terminar aislando y afectando atributos personales en mujeres y hombres, y en diferentes clases sociales. La hija de un magnate actuó igual que el hijo de un plomero.
Para entender cómo influye el dinero hay que considerar a los actores y sus interacciones, las leyes que los regulan y el contexto. En EEUU el viernes negro sigue al Día de Acción de Gracias. Se anuncian rebajas y los compradores hagan cola. 137 millones se lanzan a comprar, exponiendo lo peor del consumismo,apetitos inútiles de una sociedad opulenta y la maquinaria que mantiene la economía en equilibrio. Esas ventas representan el 40% del total anual y el 6% son consumidores compulsivos que padecen de “oniomanía” -comprar para vivir-. Bajo el lema Hoy no compre nada, los críticos señalan que el 20% de los ricos consume el 80% de los recursos y el impacto devastador sobre el medio ambiente.
El sistema monetario moldea. El dinero se despegó de la economía real, es 30 veces mayor. Las reservas de los Bancos Centrales europeos pueden controlar poco; en un día de crisis, las reservas durarían pocas horas. Además el sistema crea sociedades injustas en los países que se someten a los mercados financieros. Si cambiamos el sentido al dinero cambiaría todo lo demás. Así como la moneda local crea conciencia nacional, genera competencia, no colaboración, y el que no tiene no es. La codicia y el miedo crecen según el tipo de dinero. Se podría producir alimento y trabajo para todos, pero no hay dinero suficiente. La escasez monetaria provocada por los Bancos Centrales incita a pelear para sobrevivir. El dinero se crea con préstamos. Si un banco presta X , crea el dinero que luego circulará. Pero hay que devolverle X por 2; y el banco logra que el deudor se lo consiga.
La nuevas monedas complementarias. Pero hay otra manera. El 10% del comercio internacional es trueque: Pesi retira en vodka sus ganancias en Rusia, las compañías aéreas crean moneda con promociones de millaje, Hureai Kippu -bonos de servicios en Japón- se canjean por horas trabajadas y complementan al yen, Time dollars (dólares de tiempo en New York); lets en Londres, etc.: todos resaltan la cooperación sobre la competencia.
Dos personas que usan time dollars o dólar tiempo, crean el dinero por simple acuerdo; no hay ni escasez ni cantidad infinita de esa moneda. Nadie puede dar miles de horas, pero tampoco provocar escasez artificial. Este sistema estimula a cooperar.
En otras épocas no se invertía a corto plazo depredando el medio ambiente. Con la oxidación del dinero, -un impuesto a su acumulación- se realizaban obras valiosas. Era un sistema que lograba lo opuesto al actual: que el dinero se viera como un bien público, como la telefonía o el transporte y se pagaba por usarlo. Si tengo un billete de 100 y dentro de un mes debo pagar uno si lo sigo teniendo, ¿que haría?: trataría de usarlo. El dinero sirve cuando circula y no como reserva: así se crean trabajo e inversión. En vez de cortar árboles y guardar el dinero, hay que plantar semillas. Invertir en catedrales como en el siglo xii cumplía funciones económicas: atraer peregrinos, los turistas de hoy. Construidas para durar crearon dinero a largo plazo: Chartres vive del turismo desde hace 800 años.
Hoy en día las desigualdades crean tensiones, violencia y guerras. Es posible atacar esos problemas con la creación consciente de monedas complementarias. Cuando la crisis monetaria llega, estas monedas complementarias son como las ruedas de auxilio. En la crisis rusa surgió el sistema corona de oro, en Tailandia en 1997-98 y en Argentina los clubes de trueque. El sistema monetario no sabe enfrentar el envejecimiento de la población, la inestabilidad monetaria, la destrucción del planeta y la revolución de la información que aumenta el desempleo. La lucha contra la exclusión necesita herramientas innovadoras como las monedas complementarias que representan un medio alternativo para intercambiar bienes y servicios sin utilizar efectivo. Convertir este mundo para pocos en un mundo para todos exige desarrollar una nueva conciencia monetaria.
* Dr Horacio Krell. Director de Ilvem. Secretario de rel. internacionales de UAF Unión Argentina de Franquicias y Propulsor de UP Unión de Permutas horaciokrell@ilvem.com.
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