El olfato es un sentido primitivo que vincula directamente la percepción con la emoción. Con la bipedestación crecieron los sentidos intelectuales como la vista y el oído y retrocedieron los sentidos químicos como el tacto, el gusto y el olfato. ¿Se puede desarrollar el olfato emprendedor?
El hombre fue más allá del buen olfato que tienen los animales, tiene ese talento para descubrir que a veces se conoce como buen olfato para los negocios o la capacidad de realizar exitosamente una tarea difícil como se ejemplifica en el olfato del goleador.
Para Platón el comienzo es el aspecto más importante del trabajo. El emprendedor posee el don de darle forma a las ideas haciendo que las cosas ocurran al convertir las ideas en iniciativas, planes y proyectos.
El poder emprendedor. Hay una fuerza interior que en el mundo se conoce como empowerment y que se puede canalizar. En cualquier profesión hay que movilizar la energía espiritual, convertir espíritu en materia descubriendo con el autoconocimiento qué es lo que nos apasiona tanto como para que sea el eje de nuestra vida. Para lograrlo hay que sumar conocimiento + acción. De la interacción entre saberes y hechos nacen las ideas y de esta gimnasia surge la oportunidad, que es la invención de una solución para un problema descubierto por estar en el momento justo en el lugar correcto.
No se trata del azar sino de la buena suerte, de aprender a convertir los sucesos diarios en fuente de oportunidades. Para Pasteur el azar sólo favorece a las mentes preparadas y para Einstein la imaginación es más importante que el conocimiento. Para convocar conocimiento, información y azar no hay que esperarlos pasivamente, debemos ir a su encuentro mediante el contacto fluido con la realidad. Lo que soy y lo que hago debo conectarlo con lo que son y lo que hacen los demás. Por ejemplo al escribir, participar en una exposición, concurrir a congresos, viajar, etc., se va generando el caldo de cultivo para desarrollar el olfato emprendedor. El contacto es fundamental, de 60 ideas sólo una tiene éxito, pero hay que producir 60 para que una triunfe.
Desarrollar el olfato emprendedor. El movimiento y la oportunidad están servidos en el banquete que nos ofrece la vida pero ¿por qué solamente algunos lo aprovechan? Por un lado está el conocimiento caracterizado por la frase si no crees en la educación prueba con la ignorancia, por el otro la actitud. Bernard Shaw dijo que la persona razonable se adapta al mundo y la persona irrazonable adapta al mundo a él: el progreso depende de la persona irrazonable. El tercer factor es la inteligencia social: dime con quien andas y te diré quien eres. El emprendedor no se queda sólo con sus recursos, su actitud de apertura y sus relaciones, siempre tiene in mente un proyecto. Para Séneca no existen vientos favorables para el que no sabe a qué puerto quiero llegar.
Sin embargo no todas las acciones ni las ideas son favorables para alcanzar el objetivo.
Para desarrollar el olfato emprendedor hay que aprender en la acción, el feedback continuo con la realidad es lo que evita que los errores se conviertan en hábitos.
El emprendedor exitoso es el que aprendió a respirar, a inhalar el olor de la información y a exhalar el perfume del conocimiento, a hacer transitar por los canales correctos sus iniciativas, a convertir la necesidad del cliente en el deseo por el producto o servicio que él ofrece. En la aventura de crear su marketing personal comprendió que la necesidad no se puede crear, que no se puede remar contra la corriente, pero que se puede convertir la necesidad en deseo sabiendo que el deseo nace de una necesidad. La sed existe, hay que lograr que el deseo elija nuestra solución antes que la de un competidor.
Dónde está la sabiduría. Cómo se preguntaba Elliot: dónde está el conocimiento que se perdió con la información, dónde está la sabiduría que se perdió con el conocimiento. El desarrollo del olfato comercial requiere volver a las fuentes para potenciar el conocimiento con la experiencia. Así se crea el círculo virtuoso del desarrollo del olfato emprendedor. El costo tiempo de los proyectos conviene volcarlo a proyectos viables, atractivos y que generen valor económico. "Elige tus batallas para que sean lo suficientemente grandes para tener sentido y no demasiado chicas para carecer de él".
El olfato emprendedor representa a la sabiduría y surge de la interacción entre la capacidad incrementada por el saber y la práctica, con la creatividad y la innovación que surgen del modelado de un cerebro creador. El enfoque estratégico recicla el proceso del cual no puede apartarse la ética y debe responder estas preguntas: ¿dónde estaba ayer, dónde estoy hoy, dónde quiero estar mañana y cómo haré para conseguirlo?