Buenos Aires,  31 de octubre   de 2009

Hay principios de administración generalmente aceptados, principios que también pueden aplicarse a la administración del cerebro, ya que administrar en sentido amplio es conseguir que se hagan las cosas. En este punto hay que distinguir la eficiencia que es lograr que las cosas se hagan bien, de la eficacia que es hacer lo correcto. Otro principio clave en relaciones públicas es: “Hacerlo bien y hacerlo conocer”.

Si quisiéramos dictar un curso de administración acelerado deberíamos empezar por elegir objetivos valiosos. No tratamos sólo con personas y cosas sino que tenemos que armonizar también la administración  del tiempo y la mente.

La pasión por el trabajo brinda inteligencia emocional y potencia la acción. Conviene crear personajes imaginarios que corporicen los diversos aspectos de la personalidad. Son el Yo soñador, el Yo crítico y el Yo ejecutor, los que deben ir acompañados de un Yo observador que verifique la correspondencia de las acciones con el objetivo.

El tercer punto del curso es que al controlar los resultados tengamos la flexibilidad necesaria para cambiar los planes, los objetivos y los métodos según corresponda.

Walt Disney dijo una vez que lo que puedes soñar lo puedes hacer. Por eso en Disney World creó una organización administrativa coherente con este postulado. Veámosla:

LAS TRES OFICINAS  DE WALT DISNEY

Prohibido criticar

Oficina 1 que ocupa el  “Yo-soñador”.¿Cuál es la nueva idea?

¿Qué  resultados esperamos?¿Para qué los queremos? ¿Cuál es el propósito?¿Qué beneficios obtendremos?

Si lo puedes soñar lo puedes hacer. Walt Disney

“Yo-realista”.

Oficina 2 que implementa las ideas del “Yo-soñador” que pasaron el examen del “Yo-crítico”.¿Cuándo se alcanzará el objetivo?

¿Quiénes estarán implicados?¿De qué forma se llevará a cabo?

¿Qué nos mostrará que nos estamos aproximando al objetivo?

“La iniciativa enseña a actuar y no a hablar”. Séneca.

El yo crítico

La ley de Murphy: todo lo que puede salir mal va a salir mal.

Oficina 3, la  del  “Yo crítico”. ¿A quién afectará la nueva idea? ¿Por qué podría oponerse?¿Tenemos los  recursos, habilidades, tiempo, entusiasmo, necesarios? ¿Cuál es la mayor preocupación?¿Cómo podemos mantener lo positivo al implementar la nueva idea?

La realidad es la única verdad. Aristóteles

RESOLUCIÓN CREATIVA DE PROBLEMAS EN DISNEY  WORLD

Se gastaban fortunas trasladando el dinero hasta los bancos
¿Qué hacer con el dinero cada noche, al cerrar el parque?

¿Cómo lograr que cientos de miles de dólares tengan buen recaudo?

¿Cómo economizar en costos de traslado y seguridad?

Al  “Yo soñador” se le ocurrió una idea.

Con esta pregunta cerramos nuestra presentación en el festejo del día del emprendedor el día 27 en la sala magna de la UTN, Universidad Tecnológica Nacional. Abrimos el interrogante para todos los lectores de este boletín. Respuestas a concursos@ilvem.com

Y nos vamos parafraseando la frase de Disney en el cerebro de emprendedor que todos tenemos y que debemos aprender a administrar: “Si lo pueden soñar lo pueden hacer”.

Me despido de ustedes hasta el próximo boletín.

Consultas a horaciokrell@ilvem.com.