SLUMDOG MILLIONAIRE

*Doctor Horacio Krell

Costó 15 millones de u$s, aunque cualquier película de Hollywood supera los 100 millones. Nadie quería estrenarla. Sin embargo, actores, un libro y un guión desconocidos, lograron que se convirtiera en un éxito mundial.

Christian Colson, el productor de Slumdog Millionaire ( Perro Millonario), al recibir el Oscar dijo: "Cuando comenzamos no teníamos estrellas, ni dinero. Teníamos un libreto de amor. Teníamos la extraordinaria ciudad de Bombay. Teníamos pasión".  

"Slum" significa "Villa Miseria", es algo peor que los antiguos conventillos. El perro sería un "Perro villero", o “de basura". Pero "Slumdog" lo refiere a una persona, no a un perro. Por eso este título ofendió a sus habitantes.

En la India. Un joven participa en  el programa de TV indio símil del americano: ¿Quién quiere ser millonario? Jamal está a punto de ganar 20 millones de rupias si su respuesta es correcta. La incógnita es:  A: hizo trampa; B: tuvo suerte; C: sabía las respuestas; D: estaba predestinado. Jamal no tuvo educación formal y sí una infancia lacerante. Se ingenió -capitalizando el azar- para participar  en ese concurso.

En la vida real los pequeños actores, que protagonizan el film, podrán salir de los suburbios de Bombay, si el gobierno cumple con el regalo de una casa para ellos, aunque no podrán disponer del dinero hasta que lleguen a  la mayoría de edad.

La diferencia que hace la diferencia. Jamal cree que Latika, el amor de su infancia que perdió en sus desventuras,  lo verá por TV y entonces podrá encontrarla.

Para responder las preguntas Jamal usa con inteligencia sus escasos conocimientos. La escuela de la calle le enseñó a sobrevivir, un arte  que no se aprende en la escuela.

La clave fue su inteligencia espiritual, sostenida por el amor a Latika, que le brindó la energía para superar todas las adversidades. Su hermano mayor, en cambio, cayó en las manos de una red criminal y se convirtió en uno de ellos. Inclusive les entregó a Latika.

La resiliencia estratégica. En los Slum, las enfermedades son frecuentes en los niños. Mal curadas agravan los cuadros clínicos, inverosímiles pero reales ¿Cómo superarse desde las peores condiciones de vida? La resiliencia es la capacidad que desarrollan algunos hombres para sacar provecho de la adversidad. Jamal fue resiliente, convirtió su espíritu en materia logrando el premio de 20 millones de rupias, aunque su  premio mayor fue el reencuentro con Latika. El pueblo festejó el triunfo. Así funciona el mundo: unos pocos se salvan, la mayoría es pobre y el triunfo de uno es el de todos.

¿Cambiará el mundo? En su mensaje al congreso Barack Obama dijo que  la falla empieza en el hogar. La educación no incentiva a que los chicos estudien y EEUU perdió el tren de la historia. Apostó por cambiar la educación -la madre de la ciencia- para que la ciencia adquiera conciencia social. En un conmovedor discurso puso a los americanos de pie convocándolos al renacimiento para que el mundo no sea la herencia que malgastamos y transferimos como una hipoteca a nuestros hijos.

Dio ejemplos vivos que lo acompañaron en el discurso: una niña que le mandó una carta diciendo que no iba a renunciar al futuro, un banquero que repartió 60 millones de honorarios entre sus empleados. Obama dijo que el triunfo sólo será posible si los norteamericanos recobran los valores que lo hicieron posible ¿Existirán otros Obamas?

Inteligencia país. Los países en desarrollo pierden cuando la inteligencia se va, las economías desarrolladas la reciben. El desafío es crear inteligencia país. No basta con brindar información y conocimiento, hay que aprender una forma de ser, de crear y de hacer. La ciencia sin política y educación tiene patas cortas.

Obama señaló 3 pilares del cambio y si bien la ciencia rondó su discurso enfatizó en energía, salud y educación. Sin cambiar la energía por otra limpia y renovable se depredará el planeta. Advirtió que cada vez menos acceden al seguro de salud, pagan con la vida la riqueza de unos pocos. Hay que dejar de elegir a los que venden ilusiones.

Hay pueblos que lo logran. El himno finlandés dice: “somos pobres, no tenemos oro, nuestro principal recurso es nuestra gente”. Finlandia invierte el 6% de su PBI en educación para igualar oportunidades, para que cada uno llegue tan lejos como su capacidad lo permita. Un pueblo educado no admite la corrupción. Finlandia es primera en transparencia, posee excelentes asesores  y no amigos gobernando. Un pueblo educado no tiene pobres, diferencia al demagogo del comunicador serio, consume y hace funcionar la economía. Obama quiere poner el dinero en el bolsillo de la gente.

La mala pata. Cuando una mala pata crece todo lo que está sobre la mesa se cae. En EEUU la mala pata fue la banca, la corrupción, la guerra y que la gente perdiera los valores, quedando  prisionera en la cárcel de cristal que Orwell vaticinara en 1930: esclavos en canje por consumo y entretenimiento. La ciencia sin contacto con la política es un espejito de colores. Si funciona la educación: la educación nos hará libres.

En "Slumdog Millionaire", Jail usa la inteligencia. Los golpes de la vida y el deseo de recobrar el amor perdido, le permiten transformar la información, el conocimiento y las cruentas experiencias, en sabiduría, superando las trampas y aprietes del conductor del concurso para que perdiera y la represión policial para que confesara la supuesta trampa.

Nada es imposible cuando reina la igualdad. No es casual que el éxito de Slumdog Millionaire" coincida con el triunfo  del desclasado Obama y con la explosión de entusiasmo en todo el mundo. Los que hicieron propia la victoria, reflejan la oportunidad de cambio que viene de la mano de un individuo tocado por el azar, del desastre económico, de la guerra perdida, de la pérdida de prestigio; así como el joven indio representa a un hombre protegido por los dioses.

Slumdog Millionaire cuenta  que nada es imposible, que los milagros existen, que el mundo de los poderosos puede ser derribado por un golpe de fortuna. Nada es intocable, nada está a salvo del castigo. Los que mantienen un código de moral y de justicia merecen una recompensa en vida. No es una gran film, pero está hecho con la materia prima de los sueños, y en esta encrucijada de la historia precisamos sueños extraordinarios que nos liberen de las pesadillas derivadas de los que, impunemente, han llevado al mundo a una de las crisis más graves de su historia.

*CEO de Ilvem, Contador Público y Licenciado en Administración de empresas (UBA). Contacto horaciokrell@ilvem.com